Cocó. 21 por ahora. Sin gatos, la mayor de una colección de tres hermanas, adicta a las variaciones del té con canela, fumadora más que social, emotiva. De creatividad lluviosa y nublada, de risas despejadas y calurosas, desapegada y enraizada en cosas que no debería, pequeña de estatura, desenterrando a la otra que se revolcaba de risa y no tenía miedo a hacer el loco, pescadora de recuerdos, friolenta y feliz dentro de todo.

martes, 3 de septiembre de 2013

Las palabras se las lleva el viento,  pero sobreviven en el eco del tiempo. Me considero alguien de pocas palabras, pero no estoy segura de haber sido lo suficientemente inteligente como para usarlas en el momento y lugar indicado. Es difícil aceptar el silencio propio cuando irónicamente hace eco en alguien más, como ahora. Hasta ahora no me importaba, y no sé como empezar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario